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Un traspié con "el traspiés"

Veo el Celta-Betis (0-1) y oigo al comentarista que el equipo gallego ha sufrido "un nuevo traspiés". Antes había apuntado otros casos en los periódicos: "Al jugador se le ha notado realmente afectado por este nuevo traspiés", "un traspiés de los que se recuerdan a final de temporada", "no es el primer traspiés del City"...

En todos esos ejemplos se establece mal la concordancia de número. El Diccionario Panhispánico de Dudas, elaborado conjuntamente por todas las Academias del español, indica a ese respecto: "No se considera correcto el uso de la forma 'traspiés' para el singular: ‘un traspiés”.

Las Academias definen este término como "resbalón o tropezón" y "error o fracaso", y ponen como ejemplo "Dio un traspié al salir".

Por tanto, al decir "el traspiés" se incurre en el mismo error que si dijéramos "el delantero sudó la camisetas" o "el portero no atrapó el balones". Llevados los ejemplos a un terreno más similar, equivaldría a decir "el disparo le sorprendió a contrapiés" o "unos fueron en coche y otros a pies".

Con este vocablo se produce una duda similar cuando alguien dice "cayó de pies". El Panhispánico de Dudas señala al respecto que esa forma arcaica se siente como vulgar y que "ha de evitarse en el habla culta". O sea: debemos escribir "cayó de pie".

Quizás se halle detrás de estos despistes otra palabra basada igualmente en esa parte del cuerpo...; en este caso, el cuerpo de un animal: "el ciempiés", que puede llevar artículo en singular pero termina también en una ese porque evoca un plural: cien pies.

No se pueden asimilar con "traspié" palabras como "el cortaúñas", "el sacacorchos", "el lavaplatos"…, que llevan artículo en singular aunque terminen en ese. Porque se trata también de vocablos compuestos por verbo y sustantivo en los cuales el segundo elemento sólo puede ser plural (pues de poco servirían un cortaúña, un sacacorcho o un lavaplato). En cambio, para dar un tropezón basta con que se nos atasque en el camino un solo pie...

Recuerdo un espacio que estrenó en el año 2000 Antena 3 y que se llamó "El traspiés". Se trataba de un juego con cámara oculta en el que se gastaban bromas a personajes famosos para mostrar su reacción ante situaciones inusuales. Se pretendía con ello buscar algún traspié de las víctimas, pero el primer traspié se cometió ya con el título del programa. Empezando así, no fue de extrañar que durase tan poco.