Font, el candidato que se parte la camisa
Después de ver la puesta en escena de Víctor Font con Sí al Futur uno se da cuenta del esfuerzo que puede llegar a costar ser presidente del Barça. No sólo por el hecho de empezar a explicarse dos años antes de las elecciones, sino por buscar algo nuevo. En el 2003, Laporta ya innovó. Font recoge el testigo y se presenta precedido de una banda de jazz. En medio, un mensaje en el que descubrimos que sus hijos admiran a Piqué (tómese como guiño), que habla con Xavi permanentemente, que accede al estadio por la boca 103, que a las finales va con la estelada y que cuando entró por primera vez en el Bernabéu cantó “esto no es un campo, es un futbolín”, que ha jugado con Sandro y Laporta, que se partió la camisa como Camarón cuando Iniesta marcó al Chelsea y que admiraba a Krankl porque es un ‘levantarecopas’ (guiño generacional).
Adelantó que guarda ases en la manga, que busca el gobierno de los mejores y que su poder de convocatoria es transversal. Gaspart, Puyol, Masip, los hermanos Garcia Junyent, Alfonseda, Minguella, Joan Vilà (prolongación de Xavi en la tierra) o Meritxell Borràs estuvieron. Y algo tendrá, porque el Barça envió al impecable Josep Vives, al mismo tiempo que contraprogramaba con Messi y el Circo del Sol y a media conferencia se anunciaba un fichaje.