El mapa electoral del Barça empieza a configurarse a dos años de los comicios

Toma de posiciones. Josep Maria Bartomeu ganó hace tres años y medio las elecciones a la presidencia del Barça de manera incontestable (54,63% de los votos por el 33,03% de Joan Laporta). Está, por tanto a mitad de su mandato —en el Barça son de seis años— pero eso no es inconveniente, casi todo lo contrario, para que el mapa electoral empiece a moverse. Acaba de declararse en el entorno blaugrana la temporada oficial de ruido de sillas, cenas clandestinas, toma de posiciones, reuniones conspiratorias, insinuaciones de pacto, reclutamiento de incondicionales y alianzas imposibles para tomar posiciones de cara al asalto del palco. Un pollo que deja en nada el que hay montado en la secretaría deportiva a causa del fichaje del '9', la continuidad de Valverde, la matraca de Neymar para volver o los intentos de convencer a todos los holandeses que empiecen por 'De'. Eso no es nada comparado con lo que genera la política de salón blaugrana.

Desde dentro. Los movimientos no únicamente se limitan a lo que se conoce como la oposición. Empiezan en la junta. Hay que dejar claro que por mandato estatutario Josep Maria Bartomeu no puede volver a presentarse, pero puede avalar una candidatura continuista. Teniendo en cuenta el desastre que supuso en 2010 la fragmentación de las candidaturas continuistas nacidas de la última junta de Laporta, parece claro que debería haber un solo candidato de dentro de la planta noble. Pero resulta que parece que hay tres aspirantes. Uno es Jordi Cardoner, vicepresidente primero y que aspira a lograr lo que su abuelo, Nicolau Casaus, no logró. Dentro de la junta también se posiciona Maria Teixidor, que podría hacer historia siendo la primera candidata a presidir el club. Y no descarten la figura de Xavier Vilajoana, el directivo más futbolero de todos (llegó a jugar en el Barça C).

Desde fuera. El próximo 31 de enero el empresario Víctor Font presentará en público su proyecto, en el que lleva trabajando desde hace tres años. No se presentó a los últimos comicios al considerar que no estaba aún madura su idea. Laporta ya ha dejado caer que está dispuesto a volver tras su "no surrender" de la última noche electoral y entre bambalinas se siguen apuntando nombres de tapados. Albert, Beto, Agustí que lo ha sido todo en el deporte catalán es uno de los que más suenan. Y no es el único. Abogados y hoteleros se sumarán a la fiesta.