Carolina Marín: la mejor embajadora en Asia
El presidente de China, Xi Jinping, remató su visita oficial a España en noviembre con una cena en el Palacio Real, con los Reyes de anfitriones. Entre los asistentes estuvieron representados las principales instituciones del país (Gobierno, Congreso, Senado…) y locales (Alcaldía, Comunidad…); expolíticos con recorrido (Javier Solana… ); más de una decena de empresas (Telefónica, Prisa, Iberia…); ilustres de la cultura (Plácido Domingo, Javier Fesser, Alberto Reguera…). Y una deportista: Carolina Marín. La onubense no fue invitada por su palmarés, que ya sería un motivo sobrado para una campeona olímpica, mundial y europea, sino porque triunfa en un deporte de enorme arraigo en Asia. El propio Jinping se preocupó por preguntarle por el bádminton chino, a lo que Carolina le dio una respuesta tranquilizadora.
La tricampeona mundial juega más en Asia que en Europa, porque allá está el calendario principal, y se ha hecho muy popular en aquel continente. Este mismo sábado volverá a participar en la Premier Badminton League, una liga profesional india que se extenderá hasta el 13 de enero. Un año después de lograr el título con los Hunters de Hyderabad, Carolina repite en esta competición con un nuevo equipo, los 7Aces de Pune, que son propiedad de Taapsee Pannu, una relevante actriz de Bollywood. La andaluza también tiene carisma allí, donde su principal rival, Pusarla Sindhu, es una heroína nacional y una de las deportistas más ricas del mundo. Carolina Marín es tan conocida en India como en China, los dos países más poblados del planeta, de largo. No se me ocurre mejor embajadora en Asia.