Fellaini chafó la guitarra

El árbitro pitaba el final en el Juventus Stadium. Y el aficionado ché, pese a la derrota, respiraba. Porque el Valencia había redondeado un partido notable ante un rival de la máxima exigencia continental. Y además, el Young Boys estaba a punto de culminar un regalo de Reyes por adelantado. Quedaba que pasara el descuento en Old Trafford para jugársela todo en casa contra el United. Y en eso, entre que se encontraba o no el dial de Manchester, apareció Fellaini, para marcar el gol, mano incluida, y chafar la guitarra de un Valencia que se veía con opciones hasta el último día.

Adiós a la Champions aunque aún queda la despedida ante el United en Mestalla. Y después, otra vez remar en Liga para volver. La Europa League ahora no es un consuelo pero poco a poco, si se van pasando rondas, ilusionará. Pero lo más importante de todo es que el Valencia ha vuelto para quedarse. A la buena trayectoria en Liga se añadió el más que aceptable partido ante una Juve que se jugaba el pase. La clasificación para los octavos no se perdió ayer, se esfumó en Berna, cuando el Valencia era un horror. Pero por suerte, el grupo de Marcelino ha crecido mucho desde entonces. Tanto que va a ser muy difícil ganarle. Tanto como le costó a la Juventus. Tanto que, a pesar de la decepción, vuelve a ilusionar. Así sí.