La enésima vuelta de Bale
Para no haber estar lesionado, el galés lo ha disimulado bastante mal. En el Madrid tienen siempre tanto miedo a hablar de sus molestias que un mínimo problema muscular se convierte en tema tabú, casi en cuestión de Estado. La bola echó a rodar cuando pidió el cambio en el partido ante el Atlético y no parará hasta que juegue un ratito el sábado ante el Levante. Demasiado oscurantismo para tan poca cosa. Desgraciadamente para el futbolista, por mucho que desde el club se afanen en tapar la realidad, las cosas son como son y Bale sigue demostrando que su físico no le permite convertirse en el abanderado de un equipo tan grande y competitivo como el Real Madrid.
Ahora se ha tirado una semana en su país para no jugar ni un solo minuto y parece que hay que aplaudirle por tan leal gesto al club que le paga. Sólo faltaba que hubiera hecho con Gales lo que no es capaz de hacer en su equipo: jugar sin estar al 100%. Igual hubiera sido más normal que se hubiera quedado tratándose en Valdebebas, ahorrándose dos viajes para nada . El sábado volverá y seguro que lo hace bien, entre otras cosas porque hay pocos futbolistas de élite a los que se les permite jugar sólo cuando no tienen ni la más mínima molestia. Si todos sus compañeros en el vestuario hicieran lo mismo, el Madrid tendría que jugar cada jornada con un montón de juveniles...