Los croatas de LaLiga, el gran estreno de André Silva y la oportunidad del bichito

Off the top. En el lenguaje de los surfistas es estar en la cresta de la ola. Y ahí se han situado los croatas de LaLiga. Modric, primero, y ahora Rakitic se han convertido en los grandes protagonistas del mercado. El interés del Inter por Luka, además de sembrar el pánico en la Casa Blanca, le ha servido para que le suban el sueldo. Lo de Rakitic y el PSG está aún por decidirse. La secuencia de los fichajes de Rakitic ha ido subiendo como su fútbol; de los 2,5 que pagó el Sevilla a los 18 que le costó al Barcelona y a los 90 que están dispuestos a pagar en París. Por algo han llevado a Croacia a ser subcampeona del mundo. Kovacic (Chelsea), Vrsaljko (Inter) o Kalinic (Atlético) ya se han beneficiado de ellos.

André Silva. No ha podido tener mejor estreno en LaLiga el portugués del Sevilla. Tres goles en un partido por los dos que marcó con el Milán en la Serie A la pasada temporada (10 goles en 40 partidos). Desde Romario en la temporada 93-94 nadie marcaba un hat-trick en su debut. Nada tiene que ver el trato protector de Machín con el que le dispensaba Gattuso en su anterior equipo. El pequeño Deco, como así le llaman, comenzó en el fútbol porque era un niño muy introvertido y su padre quiso que se relacionara. Se convirtió en la joya del Oporto y el Milán pagó por él 38 millones de euros, un precio que casi le condena. En el Sevilla puede demostrar por qué le consideran el heredero de Cristiano.

El bichito. Un futuro brillante se planteaba delante de Jesé. Con 18 años debutaba en el Real Madrid de la mano de Mourinho. Era la perla de la cantera madridista a la que llegó en 2007. En el filial madridista superó la marca de Butragueño como máximo goleador con 22 tantos. Todo parecía estar de su parte, pero aquella lesión que sufrió en la rodilla en el partido de Champions contra el Schalke le tuvo 8 meses fuera de juego. En 2016 fichó por el PSG de Emery por 25M€, un movimiento que parecía enderezar el rumbo de su carrera, pero su triste paso por el equipo parisino, en el que cobraba 250.000 euros mensuales, le llevó de cesión en cesión, primero a Las Palmas y después al Stoke City. Tampoco ha ayudado su vida personal constantemente expuesta en las redes sociales y sus devaneos con la música, en el grupo Big Flow y después en solitario como Jey M. El Huesca llama a su puerta y el 'bichito' tiene otra oportunidad.