El Atlético saca las dos patitas
Sin perder la noción de que estamos a mediados de agosto, y de que en el fútbol nos gusta mucho una conclusión y un titular, tirando de imprudencia y exageración, hay que reconocer que en la final de la Supercopa de Europa, ganada justamente por el Atlético, los del Cholo corroboraron, por momentos, que cuentan, sin exagerar, con la plantilla más completa de su era. Gabi y Torres pueden estar tranquilos porque el libro de instrucciones del Cholismo (siete títulos) está en buenas manos con Godín y los que deben de subir de rangos esta temporada: Koke, Saúl y Griezmann. Los canteranos deben de ser conscientes de que sus palabras esta temporada deben de tener más peso y convicción a la hora de hablar en voz alta. Me encantó la reacción de Koke tras su gol, concienciando a todos de que más que nunca había que estar juntitos. Lo de Griezman es ejemplar. Un crack campeón del mundo priorizando siempre las palabras “trabajo” y “ayuda”. Toda esta mezcla es la pócima de estos maravillosos años.
Esta temporada, con la llegada de los fichajes, el equipo ha dado un salto de calidad. En la final de Tallin pudimos comprobarlo con Rodrigo y Lemar. El mediocentro demostró de nuevo una personalidad arrolladora a la hora de quererla, siempre en línea de pase y dándole agilidad y rapidez al juego. Su control orientado le abre muchas opciones para que corra la pelota, de las cuales Griezman y Koke serán los grandes beneficiados para recibir antes y en ventaja. Con Lemar, aparte del desparpajo, se abre una vía al desequilibrio, a la creatividad y el control. Con el francés hay un desafío bonito a la hora de complementarse con su compatriota Griezmann y repartirse las labores, ya que ambos son zurditos y se mueven mejor por dentro, deben saber repartirse los espacios con y sin balón. En el aspecto colectivo y con los generales del Cholo tendrán que ir a clase para interiorizar el libro de instrucciones, ese que les explica que, en muchos momentos de un partido, sin balón también hay paraíso en este Atlético (siete títulos). Con cautela y humildad, sin querer ser imprudente ni exagerar, este Atlético de Madrid tiene mimbres este año para no sacar una, si no las dos patitas.