Si Tánger les pareció lejos al Barça y al Sevilla, figúrense lo que es Tallin para madridistas y atléticos. Sin embargo, un buen número de animosos aficionados-turistas se ha desplazado a esa preciosa ciudad, a orillas del Báltico, para esta Supercopa Europea que ensalza, sobre todo, el valor del fútbol madrileño. Y lo hace un día que es fiesta en Madrid, como en casi toda España: la Asunción. En Madrid la Virgen de la Paloma, cuya tradicional celebración pone fondo a una zarzuela inolvidable. Día de ‘kermesse’ en Las Vistillas, y hoy también de derbi madrileño por todo lo alto. Un partido bueno, que los dos quieren ganar y temen perder.