Del Villarato al Rubialato

Ha cambiado mucho el cuento. No hace tanto que las visitas del presidente de la FIFA a España eran para meternos el miedo en el cuerpo. Para amenazar con dejar fuera a España de un Mundial. Lo hizo Blatter, que vino reclamado por Villar para eso mismo. El Gobierno le quería llevar a unas elecciones y él no quería. Para resolverlo llamó a su primo el de Zumosol, y Blatter, ahora inhabilitado por corromperse y corromper pagándole a Platini una morterada, se plantó en Madrid, lanzó su amenaza y dobló la voluntad del Estado. Muy mal por los dos.

Hoy se celebró la Asamblea de la Federación (RFEF) y vinieron a Madrid como aliados y no como enemigos los presidentes de la FIFA y de la UEFA. Infantino lo hizo en solidaridad con Rubiales, que se perdió su primer Congreso de la FIFA porque le pilló por medio la espantada de Lopetegui. Ceferin porque conoce el peso en Europa de la RFEF. Un gesto significativo, ya que es la primera vez que los dos Papas del fútbol mundial aceptan una invitación para participar en el cónclave de una asociación nacional. Un gesto importante. Rubiales y España tienen el apoyo de la FIFA y de la UEFA. Con Villar lo tenía sólo él. Esto es lo que va del Villarato al Rubialato, que no es poco.