Inquietud por la falta de fichajes

No es cuestión de perder los nervios tan pronto. Queda un poco más de un mes para que comience la temporada, aunque también es verdad que faltan cuatro días para la puesta en marcha de la pretemporada en el Real Valladolid y los fichajes brillan por su ausencia. Sergio empezará con lo que le queda del año pasado y unos cuantos canteranos. Cierto es que el mercado cierra el 31 de agosto, pero también es una realidad que los blanquivioletas van a tener un mes escaso de entrenamientos antes de debutar en la competición y que muchos de los que lleguen ni siquiera van a estar ese tiempo entrenando con su nuevo equipo y sus nuevos compañeros.

Lo ideal sería haber podido trabajar cuarenta días antes de la Liga y con la mayoría de la plantilla desde el principio. Y por las circunstancias, ni una cosa ni la otra. Las fechas del playoff, fijadas por un enemigo del sentido común, condenan a los equipos que lo disputan a disfrutar de mucho menos tiempo para vacaciones y para planificar. Y la situación del mercado, carísimo en este momento y con poco movimiento, tiene bloqueado a un Valladolid que hace sus gestiones, pero que no se decide a cerrar nada esperando que lo que hoy cuesta cuatro mañana cueste dos.

Es lógico y entendible. La obligación del club es la de configurar con sus recursos la mejor plantilla posible y el cierre del mercado está bastante lejos todavía. Pero eso no es impedimento de que los aficionados se muestren inquietos ante la falta de noticias y de llegadas cuando, a la vez, equipos como el Getafe presentan hasta a cuatro jugadores de golpe. No se trata de meter presión a Gómez para que fiche pronto porque lo que se le va a pedir es que acierte y forme una buena plantilla al final. Pero es comprensible el sentimiento del aficionado ante lo atípico de este verano. Si sirve de consuelo, justo es reconocer que Sergio González está tranquilo y no quiere caer en la precipitación. En cualquier caso, prepárense para vivir un año con muchas curvas y un número alto de emociones.