La lista de cosas que no existían la última vez que Inglaterra estuvo en semis
Historia. El periodista británico Jon Elirchman ha publicado en su Twitter una lista de cosas que no existían la última vez que Inglaterra pisó una semifinal de un Mundial, en 1990. En ella incluía el Iphone, el Blue Ray, Google, Instagram, Twitter, Facebook, las últimas siete películas de Star Wars, las siete Champions en color del Madrid, Spotify, la serie de Juego de Tronos, Tesla, Snapchat, Yahoo, los libros electrónicos y el Bitcoin, entre otros. Se le olvidó apuntar en la lista a Croacia, su rival de hoy en semifinales, que en 1990 tampoco existía como país.
Resquemor. Alex Miescher, secretario general de la Federación Suiza de Fútbol, quiere sugerir a la FIFA que los jugadores con doble nacionalidad que jueguen en las categorías inferiores con un país no puedan cambiarse de selección al llegar a la absoluta. Su preocupación reside en que hay jugadores que se benefician de los programas de desarrollo juvenil de Suiza y después se marchan a jugar a otra selección, como es el caso de Rakitic, que jugó en las inferiores suizas y ahora es una estrella en Croacia.
Punto de vista. Si Panamá no pasó la primera ronda del torneo es porque le tocó enfrentarse a Inglaterra y a Bélgica en la fase de grupos, o al menos así se consuelan los panameños. En varios diarios del país centroamericano se enorgullecen de haber caído ante dos de los semifinalistas de esta Copa del Mundo, dos potencias que han vencido a selecciones del nivel de Brasil y Colombia. Claro, así es imposible, argumentan.
Bendiciones. El Papa Francisco I dio ánimos por la eliminación de Brasil en cuartos a los feligreses brasileños que acudieron a la Plaza de San Pedro el pasado domingo a escuchar la misa papal. "Veo banderas brasileñas en la plaza, ánimo, otra vez será", dijo el jefe de la Iglesia. El Papa es un confeso seguidor del fútbol y, según informan fuentes del Vaticano, no se perdió ningún partido de Argentina ni el Brasil-Bélgica (1-2) de cuartos de final. Por muchos ánimos que diera a los seguidores de la canarinha, no parece difícil imaginar con quién iba el argentino.