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Peña La Quinta de Canario: homenaje a las leyendas de aquel 7-3 al Eintracht

Río+Zaragoza=Canario. En el año 1934 vino a este mundo en Río de Janeiro un niño robusto llamado Darcy Silveira Dos Santos. Ayer cumplió 84 años. Reside con sus hijos en Zaragoza. Me preguntarán, ¿qué pinta un futbolista brasileño haciendo parada y fonda junto a la Virgen del Pilar? Pues mucho. Darcy tiene el apodo de Canario (se lo pusieron en tierras cariocas cuando era un crío) y llegó al Madrid con su compatriota Didí. La estrella era este último, pero el fuerte carácter de Canario y su físico vigoroso, atípico en los brasileños de la época, le permitieron formar parte del once titular de la final de las finales de la Copa de Europa. La del 7-3 al Eintracht de Frankfurt en Glasgow (1960). El pasado viernes se cumplieron 58 años de esa final mítica, que cada Navidad sigue emitiendo la BBC en Gran Bretaña como culto y respeto a semejante gesta. Canario era el 7 aquella tarde, formando delantera con Del Sol, Di Stéfano, Puskas y Gento. “Yo le di una asistencia a Di Stéfano y colaboré en otro gol de Alfredo al provocar, con un remate duro, el despeje en corto del portero alemán, que aprovechó él para fusilar la portería del Eintracht”, dice orgulloso el amigo Darcy.

En su nombre. El 58 aniversario de ese 7-3 se celebró en Zaragoza, donde reside Canario después de haber formado parte en los años 60 de la famosa delantera de los Cinco Magníficos, junto a Santos, Marcelino, Villa y Lapetra. Hace tres años se creó en la capital del Ebro una peña madridista que le ha dedicado su nombre: La Quinta de Canario. En el restaurante El Serrablo, apenas a 200 metros de La Romareda, Canario vivió una fiesta de madridismo y de nostalgia. Emocionados Raúl, presidente saliente, y Fernando, nuevo presidente. Son ya 72 socios y les ilusiona llevar el nombre de uno de los supervivientes de aquel Madrid imperial. Canario nos recuerda una anécdota deliciosa de la época: “Don Santiago Bernabéu me encargó que le consiguiera un loro que hablase. Volví loca a mi familia buscando uno en Río. Y se lo regalé. Claro que hablaba. Cantaba ¡Hala Madrid!”.

Creciendo. La peña, muy activa, defiende el madridismo en Zaragoza, ciudad que ahora hierve soñando con el posible regreso a Primera. Además, han incorporado a la directiva a Luis, un empresario intrépido que preside el Santo Domingo Juventud, club que trabaja con la cantera y que está hermanado y colabora, como debe ser, con el Madrid. Como mañana se gane la 12+1 en Kiev, todos bailarán una jota vikinga...