Thomas y el valor de la versatilidad

El comodín. La consolidación de Thomas indica el crecimiento de un jugador que siempre ha sido del agrado de Simeone. El técnico argentino no duda en presumir de la polivalencia del jugador ghanés. “Es un mediocentro de base, pero está aprendiendo a ser importante en posiciones que no son la suya”, reconoció hace un mes. Parece que Thomas repetirá en el lateral derecho contra el Arsenal, papel en el que no desafinó tras la temprana expulsión de Vrsaljko en la ida. Este curso ha actuado cinco veces de inicio en esa ubicación (Roma, Levante, Real Sociedad, Elche y Alavés) y ha demostrado tener condiciones defensivas para salir airoso. Pese a que Perotti le hizo pasar un trago delicado el día del Roma, su potencia le convierte en un futbolista difícil de superar en el uno contra uno. Es agresivo en los duelos, certero en el robo (seis quites contra la Real) y dominante en la anticipación. Aun así, no controla, como es lógico, todas las situaciones que miden a un lateral.

Secuencia equivocada. A Thomas le originan ciertos problemas los envíos entre lateral y central, una grieta que no sella bien. Además, sufre en la continuación de la marca. Una jugada en Londres reprodujo este conflicto. Welbeck atacó de fuera a dentro y Thomas le siguió al pico del área. No le dejó, aunque Monreal estaba libre a su espalda y Correa o Koke podían ir a la cobertura con el delantero inglés.

Welbeck soltó hacia el centro con Wilshere, que le tiró la pared ante la reacción tardía del africano. Se quedó solo, pero Oblak salvó el mano a mano. Dos decisiones, al menos, confusas de Thomas que casi le cuestan un gol al Atleti.

Con la posesión. La falta de hábito condiciona su salida de balón. Ha mejorado en cada encuentro que ha sido lateral, pero aún necesita acostumbrarse al ver reducidas sus posibilidades de pase y ver el juego desde otro lugar. Ante el Arsenal sumó 19 pérdidas, un dato subordinado al tipo de partido que fue, y contra la Real otras 18. Necesita disminuir el número de entregas erradas como hizo frente al Levante. Aquella noche se asoció con Gabi (12 pases) y habilitó al espacio a Griezmann. Asimismo, no aporta en banda la profundidad idónea. Apenas apura línea de fondo y prefiere las conducciones interiores que aparecer por fuera (no llega a dos centros por duelo). Son pequeños detalles a pulir en un mediocentro que ya cumple como lateral. El valor de la versatilidad.