Los cambios de Simeone

Contra todo. Fue puro Atleti. Se sobrepuso a toda adversidad y rescató un botín extraordinario después de todo lo que había acontecido. Le tocó rehacerse varias veces en el partido, siempre desde la entereza táctica, alterado por la expulsión de Vrsaljko. Los cambios de Simeone acabaron con el apuro.

Valentía. El Atlético sólo se vio desahogado en el último tercio del primer acto. Adelantó su línea de presión, mordió en el quite y confundió al Arsenal. Thomas escenificó esa variación de actitud. Resultó episódico y le volvió a tocar sufrir tras el descanso.

Bloqueado. El acoso constante del Arsenal en el segundo tiempo le hizo esta contra las cuerdas. Con un 4-4-1, sin que Gameiro nunca fuera salida, estaba hundido y sin opción de respiro. No tenía traslado de balón y posibilidades de pase. La dispersión de Koke no ayudó (18 pérdidas).

Decisiones de peso. Cada sustitución planteada tuvo un efecto recuperador. Gabi dio aire a la medular y Savic contuvo la banda derecha con Thomas por delante. Griezmann pasó a ser referencia ofensiva, destinatario en largo y goleador. La vía de escape ideal. Oblak hizo el resto, como en Múnich.

Anticipación

Thomas robó dos balones que acabaron en ocasiones de Griezmann y Correa. Ve el pase y se adelanta a la jugada.

Todos en campo propio

El Atleti optó por resistir de forma numantina en la segunda parte. Cuando recuperaba no había posibilidades de estirarse al estar todos tan juntos.