Menos sanción, más carnaval

Cuando muchos calculábamos que hacia inicios de Febrero tendríamos una respuesta definitiva para el caso del dopaje de Paolo Guerrero ante Argentina, resulta que recién ayer, la defensa del jugador remitió el expediente con su apelación buscando la absolución definitiva del delantero de Flamengo.

La tardanza de la comisión de apelaciones de FIFA, para remitir los considerandos atendidos para la reducción de la sanción de un año a 6 meses, lo que le abre a Guerrero las puertas de Rusia 2018, provocó que el TAS recién haya tomado el caso en sus manos.

En el proceso, quedó claro tras la primera apelación, que no hubo de parte de Guerrero, una motivación dolosa que pretendiera la ingesta de una sustancia prohibida que buscara un mejor rendimiento sino que ésta llegó a su organismo de forma casual, fortuita e involuntaria.

En los cálculos de la defensa de Paolo está que, si la sanción por la ingesta de metabolitos de benzoilecgonina fluctúa entre los dos y los cuatro años de suspensión y en principio le impusieron un año y luego esa sanción bajó a seis meses; perfectamente es factible que, con los atenuantes presentados y algún agregado que pueda abonar en su argumentación, pueda encontrarse la absolución total y el jugador pueda retomar su carrera con Flamengo de forma normal.

El plazo para la deliberación del TAS ahora se calcula en unas 4 semanas, de manera que, en el mejor de los casos, en los primeros días de marzo, el capitán de la selección podría reanudar su actividad. De todas formas, ya el comando técnico de Gareca ha trazado un plan de trabajo físico para Paolo que lo ayude a disminuir los efectos negativos de este paréntesis en su exitosa carrera.

Habrá que esperar que como fin de fiesta de carnavales, el TAS nos deje, a nosotros los peruanos y a los hinchas cariocas del FLA, motivos para extender la celebración "do Fevereiro".