La distribución. El previsible desahogo copero, que no fue tal al ceder el empate final, sirvió a Zidane para darle una vuelta al dibujo del Madrid y organizarlo bajo un 4-2-3-1 muy marcado. Llorente y Kovacic se situaron en el doble pivote, Ceballos como hombre falso de banda y Asensio se movió como enlace. 

Circulación lenta. La modificación no clarificó la construcción desde atrás. Kovacic y Llorente ralentizaron la circulación en exceso, pese a los esfuerzos de Asensio de encajar la transición madridista. Ceballos ganó peso con el paso de los minutos.

Por la izquierda. La idea de Zidane se asentaba en desdoblar a Kovacic a la izquierda para orientar la salida blanca por ese costado, zona de acción de Ceballos y también de Asensio en muchos momentos (el 40% del juego se registró en ese ala). Theo se adelantaba al centro del campo...

Sobre Theo. Los desarreglos del lateral izquierdo desconfiguraron el empeño de Zidane de encontrar un pasillo por ese banda, apenas aprovechada en la conducción de Kovacic en el 2-1. Irregularidades tácticas de Theo en un Madrid que no pudo reformar sus alborotos defensivos.

En pocos metros

En distintas situaciones del partido, Kovacic, Llorente o Asensio se juntaron casi en la misma línea. No había fluidez en el comienzo de la jugada.

En banda

Ceballos apenas participó en fase de inicio. Se acostó en la izquierda para entrar en contacto con el balón en zonas adelantadas.