Modric deslumbra al mundo

Gran partido ayer del Real Madrid en Abu Dhabi para levantar un nuevo trofeo de Campeón del Mundo de clubes, el sexto que llega a las vitrinas del Santiago Bernabéu. Un trofeo que cuesta mucho ganar, sobre todo por el largo y duro camino a recorrer hasta llegar a acceder al mismo, nada más y nada menos que ganar la Champions. Décima final consecutiva en la que sale victorioso el Madrid, un dato tremendo. Entre los destacados en el encuentro asoma Luka Modric como gran protagonista. El croata ha recuperado su mejor versión y cuando Luka está a este nivel repercute, y de qué manera, en el funcionamiento colectivo del equipo. Ayer volvimos a ver sobre el terreno de juego esas arrancadas para eliminar rivales, esos amagos y engaños tan característicos para esconder sus pases y sus intenciones.

Es una maravilla ver cómo maneja los tiempos del partido, cómo juega y hace jugar a todo el equipo. Es de esos futbolistas que es capaz de hacer mejores a los que le rodean. También le estamos viendo pisar área rival con insistencia y con eficacia, sacando disparos peligrosos con ambas piernas, algo que sabemos que Zidane le pide. Uno de los factores que han influido en el arranque irregular del campeonato era el nivel de Modric, lejos del nivel excelso que suele mostrar, ya que se trata de un jugador bastante regular y fiable en cuanto a rendimiento. Si continúa dando estas prestaciones podemos ser muy optimistas sobre el centro del campo del Madrid, línea fundamental para que todo el equipo carbure y para poder alimentar de buenos balones a Cristiano y compañía.