Vermaelen, en su mundo

Thomas Vermaelen se ha descolgado con unas sorprendentes declaraciones en el Derniere Heure, donde califica su situación en el Barcelona como “lamentable”. Por resumir rápido, lo “lamentable” de Vermaelen ha sido su rendimiento. Fichado la temporada del triplete por 15 millones de euros más cuatro en variables, precio que empieza a parecer bajo en comparación con los dolores de cabeza (por no usar otro término) que ha dado a técnicos, médicos y fisios azulgrana, jugó 63 minutos. El año pasado su problema no podía ser su situación en el Barça. En el Roma jugó 609 minutos. En total, Vermaelen ha jugado 1.943 minutos en los tres últimos años. Eso son unos 21 partidos de unos 200 potenciales con sus clubes. Poco más de un 10 por ciento. Lamentable, en un jugador de élite.

Al menos hay que agradecerle a Vermaelen que haya hablado aunque haya sido en Bélgica, donde albergará la esperanza de que nadie haya seguido muy cerca su triste papel en el Barça. Se le puede imaginar preocupado con la posibilidad de no jugar el Mundial. Aquí no se le ha visto muy inquieto por no hacerlo del Barça. Es jugador azulgrana y como tal debe respetar que, si finalmente el club (equivocadamente, por otra parte) no fichó a Íñigo Martínez, le obligase a quedarse en la plantilla. Esta temporada, Vermaelen se lesionó en un partido casi de entrenamiento ante el Nástic. Su problema no es que no pueda jugar en el Barça o en el filial, al parecer su nuevo deseo. Es que no aguanta dos partidos seguidos. Igual es recomendable que no toque demasiado de aquí a junio. Si no, igual sí que no va a Rusia con la selección belga.