Vuelta rápida

Un español puede presumir de que sabe inglés si es capaz de traducir adecuadamente a su idioma lo que se le dice en la otra lengua. Es decir, si cuando lee “armchair” entiende “sillón”: un asiento con brazos y con respaldo cómodo. Sin embargo, si lee “armchair” y traduce “silla”, ya puede presumir…, que no le creeremos. A lo mejor se expresa con mucha corrección en la lengua británica. Pero si en castellano confunde “silla” con “sillón”, pensaremos que en realidad lo que le sucede es que no sabe español.

Eso ocurre con los comentaristas de la Fórmula 1 y del motociclismo. Ellos oyen en inglés “fastest lap”, y entienden a la perfección que alguien se está refiriendo a que un piloto ha conseguido recorrer el circuito en menor tiempo que todos los demás. Es decir, que ha logrado la “vuelta más rápida”.

Ese elemento comparativo (“más”) está inserto en la terminación de la palabra “fastest”, que se diferencia así de “fast”. “Fastest” significa “más rápida”, mientras que “fast” se queda en su raíz para decir simplemente “rápida”.

Los comentaristas de las pruebas de motor tal vez entiendan al ver en los cuadros de clasificación “fastest lap” que se está diciendo “vuelta más rápida”; pero traducen en español “vuelta rápida”; es decir, traducen “silla” donde tocaba “sillón”.

En la Fórmula 1 y en el motociclismo, todas las vueltas son rápidas. Aún diría más: son muy rápidas. Ninguno de nosotros circularía a la velocidad de la vuelta más lenta de esos vehículos en día de carreras. Por rapidez, que no quede.

Así pues, no tiene sentido decir que “Hamilton ha hecho vuelta rápida”, porque ya se está viendo que despacio no va.

Puede que a ellos les parezca demasiado largo lo de “vuelta más rápida”, y que por eso se coman una sílaba y con ella un adverbio fundamental para establecer la comparación: “más rápida” (que las demás). Pues bien, si se tratara de hallar una fórmula más breve, y en el caso de que eso fuera muy importante, podrían echar mano de una expresión igualmente correcta: “mejor vuelta”.

Esa alternativa en español tendría apenas una letra más que en inglés y ¡cuatro menos que en alemán! (schnellste Runde).

De ese modo, en vez de “vuelta más rápida para Hamilton” podrían decir “mejor vuelta para Hamilton”, y entonces entenderíamos que traducen correctamente “sillón”, en vez de “silla”.