James, Neymar y los cuatro chicos del Hércules
El regate de Neymar
Simeone volvió a colocar a Koke en la banda izquierda ante el Valencia. Con absoluta libertad de movimientos, el canterano dejó patente su facilidad para hallar el pase definitivo. Dio la asistencia a Griezmann en el 1-0 en una carrera en la que fijó a la zaga valencianista y mandó un envío preciso a su espalda. "Cuando juego en banda tengo más opciones de hacer gol y dar asistencias", observa Koke. Simeone también piensa así. Al argentino le fascina la soltura que posee Koke para el 'pase gol', como lo llama el técnico rojiblanco. El mediocentro ha dado 79 asistencias en el Atleti.
José Rodríguez, uno de los cuatro chicos del Hércules
El Madrid reclutó para su cantera a cuatro futbolistas del Hércules en el verano de 2009. Se trataba de Rafa Paéz, Jorge Beltrán, José Manuel Montesinos y José Rodríguez. Paco de Gracia, figura relevante en el organigrama de captación blanco de aquella época, fue a verlos a un torneo en Tavernes (Valencia) y se llevó a los cuatro jugadores. La operación levantó suspicacias. Miguel Aracil, director de fútbol base del Hércules, insinuó en AS que "los contactos de algunos de los chavales" explicaba todo. No era el caso de José Rodríguez, el único que el club alicantino intentó retener. Llegó a debutar con Mourinho y probó suerte en el extranjero (Galatasaray y Mainz). Ahora deja huella en el Málaga. De los otros chicos Rafa Paéz es el único que está haciendo carrera en el fútbol profesional. Juega en el Alcorcón. Jorge Beltrán está en el Alzira y de José Manuel Montesinos poco se sabe.
El sueño cumplido de Mariano
Andrés, el portero que se inspira en Gandhi
La lesión de Asenjo ha abierto paso a Andrés Fernández. El portero estaba condenado a un segundo plano. Lo aceptaba con tranquilidad y paciencia. La lectura de Gandhi le ayudaba a asumir la situación. Siempre se ha declarado un admirador del pensador indio, que le ha inspirado durante su vida y le ha servido para escapar de la burbuja diaria del fútbol.
El tío de Jon Bautista
Esta Real Sociedad ambiciona el éxito. El vuelo alto del conjunto de Eusebio le hace pensar en la Champions League. La aportación de futbolistas como Jon Bautista, canterano con un futuro esperanzador, eleva el nivel competitivo de la plantilla. El delantero marcó en el Villamarín con una maniobra de jugador notable. Es su segundo tanto esta campaña y para Eusebio es un integrante fijo del primer equipo. Bautista ha acabado, además, con un pequeño trauma familiar. Su tío, José María Bautista, disputó 147 partidos en el Sanse entre los años 1976 y 1982, pero no llegó a debutar con la Real Sociedad.
Entender a Erik Morán
Estuvo temporada y media fuera del Leganés de Garitano, pero no ha notado en absoluto el paso del tiempo. Erik Morán se ha erigido en un hombre fundamental de la medular del conjunto de Butarque a través de la filosofía de juego que siempre le ha caracterizado. Un mediocentro de orden, posicional y aseado en la distribución. No son pocas virtudes, aunque algún entrenador como Milla quiso alterar su modelo para convertirlo en un jugador de más llegada y presencia física. El equívoco no admite contraposición. Garitano interpreta a la perfección las prestaciones que puede dar el vasco.
Mosquera, el jugador de hockey
Fue el héroe del Deportivo en El Molinón. El conjunto gallego logró un triunfo imprescindible ante un rival directo con el gol del mediocentro. Su vida deportiva dio un giro cuando firmó por el Real Madrid con 12 años. Hasta ese momento parecía que iba a dedicarse al hockey patines. Mosquera lo reconoció en 'El País': "Siempre se me dio mejor y cuando me fichó el Madrid yo creo que era mejor jugador de hockey que de fútbol. Con el colegio Santa María del Mar, un equipo muy pequeño, llegamos varias veces a semifinales y finales a nivel nacional en categorías base. Teníamos un equipazo, con mi amigo Pablo Cancela, que llegó a la selección".
David Simón ha disputado los últimos seis partidos en Las Palmas. Otro producto de la cantera amarilla que sin la presencia de Paco Herrera posiblemente no hubiese alcanzado la élite. El lateral derecho se integró en la primera plantilla con 25 años, una explosión tardía que contó con el apoyo del hoy técnico del Valladolid. Jugó más de 40 partidos el año del ascenso, indiscutible en la zaga canaria. En verano tuvo que renovar y la negociación se enquistó hasta el extremo de que el club le amenazó con dejarle sin ficha. Sólo la mediación de Paco Herrera recondujo la relación.