Gol bien anulado a Callejón

Damir Skomina tuvo una primera parte en la que le obligaron a correr mucho, pero estuvo casi siempre bien colocado. Pero es verdad que tuvo poco trabajo en las áreas. Señaló algunas faltas en el centro del campo, todas de forma correcta. En el minuto 18 se pidió fuera de juego de Cristiano en primera estancia cuando centró Carvajal para que marcara Benzema. No estaba el portugués en fuera de juego, pero es además Benzema quien viniendo de atrás marca, saltando con Albiol y sin hacerle falta.

En la primera parte, disciplinariamente, sacó sólo dos tarjetas. La del 16’, a Ramos por una entrada Diawara, fue justa. No se la mereció, en el 37’, Zielinski, ya que tocó el balón antes de contactar con Casemiro. El Nápoles protestó un par de jugadas en las que Casemiro entró duro en defensa, pidiendo tarjeta amarilla para él. La primera acción fue en el minuto 13. El brasileño le metió el brazo en el cuello a Hamsik. No fue suficiente para que le mostrara amarilla, pero es que tampoco señaló falta. Sí se la mereció Casemiro en el transcurso del juego, más por reiteración. Se la perdonó en el 36’ por una falta a Insigne. También le perdonó otra a Marcelo por una fuerte entrada a Callejón en el minuto 60’.

No señaló Skomina en el 56’ una mano muy clara de Hysaj. Y acertó, ya al final, en la jugada más importante. Fue en el minuto 80’, cuando anuló un bonito gol a Callejón por un justo fuera de juego. El asistente de tribuna vio bien que Callejón estaba adelantado cuando Insigne se la cedió de cabeza.

Por último, comentar que en el 92’, en la disputa del balón entre Lucas Vázquez y Albiol, éste último chutó el balón hacia atrás, lo recogió Reina y se pidió cesión. Ni la distancia ni la forma de disputar el balón por el defensa fue como para señalarlo. Creo que Skomina estuvo bien en un choque que prometía ser más duro de lo que realmente fue.