El indicador de Sergio Ramos
Ramos rescató al Madrid de uno de sus peores partidos del curso y, sin duda, de su peor momento en la presente temporada. El Madrid volvió a agarrarse a ese tremendo magnetismo que tiene su capitán en las jugadas a balón parado, la segunda en fuera de juego, y a ese pie de precisión que tiene Kroos. Tras su semana de pasión, Ramos es admirable no sólo por sus goles, sino sobre todo por la ligereza con la que maneja la presión en situaciones comprometidas.
La noticia buena es esa extraordinaria capacidad de su capitán para marcar goles vitales; la mala es que Ramos es el segundo goleador liguero del equipo, con sólo 11 partidos jugados, por detrás de Cristiano, y por delante de Benzema, Morata y el lesionado Bale, un indicador inquietante. Más allá del mal juego, lo que debería quitar el sueño es, una vez más, el cúmulo de lesiones musculares. Marcelo, trascendental en la manera de jugar del equipo, ha sido el último en caer.