Real Madrid, Barça y City van a por Weigl

El puesto de mediocentro es estratégico. Se pide un jugador completo, con valores técnicos y tácticos específicos. Tiene que saber colocarse y, sobre todo, no descolocarse, no dejarse llevar por el ansia de atacar. Debe saber meterse entre los centrales cuando el rival aprieta y mantener luego una posición en el epicentro del juego cuando tiene el balón su equipo. Debe tener quite, con cierta agresividad, y toque y talento para distribuir. En España hemos tenido estos años dos muy buenos, Xabi Alonso y Sergio Busquets, no necesariamente por este orden. Medios centro de tanto nivel apenas hay. Parece ser una especie en vías de extinción.

El Real Madrid tiene ahora a Casemiro, mejor en el quite que en la construcción, y está criando a Marcos Llorente, que lleva sangre de Gento y de Grosso en sus venas. Mientras, mira a Weigl, joven perla del Borussia Dortmund, al que hemos visto de cerca en la reciente eliminatoria frente a los blancos. Es muy joven, pero es ya algo más que un proyecto. Tiene todas las condiciones para el puesto y bastante experiencia para su envidiable edad. Los que le conocen piensan que escapará a los reclamos del Bayern, que suele arramblar con todo jugador alemán: se crió en el gran rival ciudadano, el Múnich 1860, y no ve con simpatía ese destino.

Pero hay otros competidores serios para esta operación: el Barça y el City. En el Barça, Sergio Busquets empieza a dar síntomas de fatiga, obligado como está a jugarlo todo. En el City, Guardiola tiene déficit en esa posición; con Fernandinho no le llega y Gundogan (lesionado, además) no es tan específico. La ventaja del Madrid es que tiene buen trato con el Borussia Dortmund y que su proyecto sería no traerlo a final de esta temporada, sino de la siguiente, dado que con Casemiro y el regreso de Marcos Llorente no se sentiría tan urgido. Eso le da una ventaja en la operación frente al Barça y al City, que lo necesitarían para ya mismo.