El callejón de James solo tiene una salida
Los dichos y los hechos. Las palabras son interpretables, porque el Real Madrid no es tan ingenuo como para devaluar al futbolista colombiano, pero los hechos son indiscutibles. El papel de James en este Real Madrid tiene todos los visos de ser residual. Ya no se trata de ser suplente, sino de vislumbrar que, en cuanto vuelvan Modric, Benzema y Cristiano, el riesgo es incluso quedarse fuera de alguna convocatoria. El Madrid lo tiene claro. No se irá por menos de lo que costó. Özil, Di María, James… con sus matices, la historia tiende a repetirse.
Suplente del suplente. Los jugadores especiales, de gran calidad técnica, tienen dos fuentes de alimentación: la confianza y la continuidad. Precisamente, lo que el colombiano añora. James ha perdido peso en el Madrid de Zidane a pasos agigantados. Asensio, Lucas Vázquez, Isco y Kovacic están ya por delante de él. No cabe ni en la línea de centrocampistas, ni es siquiera segunda opción por detrás de la BBC. Estirar esta situación es un sinsentido, porque tanto el club como el jugador acaban perdiendo. En el entorno de Jorge Mendes insisten en que no se va a mover y todo suena a partida de poker. La cuenta atrás ya ha empezado.
El caso Isco. El malagueño es otro que se encuentra en un cruce de caminos. La Juve y algún club de la Premier llaman a su puerta. La temporada pasada ya desempeñó un rol secundario y se llevó el palo de no verse en la lista de la Eurocopa. Ahora llega Lopetegui a la Selección. Isco fue el jugador bandera de la Selección Sub-21 que ganó el Europeo en Israel con Julen en el banquillo. La suplencia en Anoeta y la lista del viernes pueden ser indicadores cristalinos del camino a seguir. El más claro ha sido perder la sonrisa. Da la impresión de que Marco Asensio se ha quedado hasta con su duende.
La Selección más madridista. Puede que sea una cuestión coyuntural, pero hasta siete jugadores del equipo blanco son susceptibles de ser convocados por Julen Lopetegui (Carvajal, Ramos, Nacho, Isco, Lucas, Asensio, Morata) Tiene pinta de que el equipo nacional, después de muchos años, pueda tener más jugadores del Real Madrid que del Barcelona. Sin duda, una perspectiva llamativa del cambio de ciclo.