España juega y Del Bosque compite

Del Bosque está disgustado. Más que por los errores individuales, el de Ramos en el primer gol y en el penalti, o los de De Gea en ambos tantos, por el fallo colectivo de España en el 2-1 de Croacia. Fue un gazapo de pitón a rabo. A un equipo de verdad no le puede pasar esto en el minuto 89 jugando con doble pivote y cuatro defensas y valiéndole el empate. Y conste que Del Bosque se lo advirtió. Lo hizo cuando Piqué, Cesc y algún otro se acercaron al banquillo justo antes del fatídico momento. Llevándose el índice a la sien pidió control, tiqui-taca. Hoy reconoce en la entrevista que faltó perder un poco de tiempo, marear la perdiz. O sea, faltó oficio.

Esto se justifica diciendo que es consecuencia del espíritu ofensivo de España. Pero ellos saben que no es así. Pecaron de cándidos. Los Manolos mostraron ayer unas imágenes en las que se ve a Silva viendo el gol repetido en el marcador. “El campo entero para ellos”, maldice. Pues sí. Así es, David. Una cosa es jugar y otra, competir. Ellos jugaron para ganar y Del Bosque usó el índice en la sien para competir. Como el próximo rival es Italia, a la que jamás le han hecho un gol así en una fase final, igual conviene meter un gen competitivo en París. El que lo tiene, porque se lo ha inoculado Simeone, es Koke. No sé, pero no creo que haya muchos cambios en el once. Si acaso uno. Para que espabile la tropa.