El sueño se convirtió en pesadilla
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El que tenía que ser el día grande de Cristiano Ronaldo acabó convirtiéndose en su peor pesadilla. El partido contra Austria en el solemne Parque de los Príncipes suponía para el delantero del Real Madrid su internacionalidad número 128, con lo que se convierte en el portugués que más veces ha defendido a su país superando a Figo, que ocupaba plaza en el palco al lado de la alcaldesa Anne Hidalgo. Además, sumaba su partido número 16 en la Eurocopa, igualando el récord de Van der Sar y Thuram. Y por si faltaran alicientes, si marcaba un gol se convertía en el primer futbolista capaz de marcar en cuatro Eurocopas diferentes.
Pues ante una grada mayoritariamente poblada por portugueses, CR ofreció uno de los petardazos más dolorosos de su carrera. Seguro que el primero que está enojado con su actuación es el propio Ronaldo, que ha jugado dos partidos en esta Eurocopa como ‘9’ de referencia de su equipo antes dos selecciones como Islandia y Austria y no ha logrado marcar ni un gol. Por mucho que el famoso algoritmo le incluyera en un once ideal de la primera jornada, Ronaldo es perfectamente consciente de que no está bien. En una carrera en la que lo ha ganado casi todo, es sorprendente comprobar como a Cristiano le sigue faltando un gran partido en una gran competición.
