Ese Leganés como signo de renovación

El Leganés ha subido a Primera, como la UCAM subió a Segunda. En la misma aspiración están el Nástic y el Girona, y no cito a Osasuna y Córdoba, que van por otro lado. El Alcorcón se quedó en las puertas de la promoción de ascenso. No cito, como ven, al Alavés, un histórico (el club de Ciriaco, Quincoces y Olivares), que no es de ese palo. Hablo de esos otros clubes que no tienen un buen estadio ni una historia detrás, pero que vienen haciendo las cosas bien en los últimos años.  Como este Leganés que anteayer celebró su ascenso ante una ciudad entusiasmada. Felicidades.

Clubes como el Leganés ocupan los huecos que otros han ido dejando libres. Hablo de los Zaragoza, Valladolid, Mallorca, Hércules, Racing, Oviedo, Castellón, Cádiz, Salamanca... Ya me entienden. Clubes con estadio, afición, ciudad, historia, cantera. Con gran implantación. La crisis los hundió y todos ellos están un peldaño o más por debajo de lo que les correspondería. En algún caso, desaparecidos. Pagaron duro los años del despilfarro y las concursales y no han conseguido reponerse. Hará falta más tiempo para saber si todos han perdido el tren de la Historia, pero ahora su sitio lo ocupan otros.

Y lo ocupan por su mérito. Han hecho las cosas bien y llegan ahora en un periodo que va a ser mejor, porque la televisión les va a garantizar un 80% o más de sus presupuestos, y porque el sistema impide ya hacer disparates. Sólo hay que pedirles una cosa, y Tebas está en ello: que se esfuercen en que el aspecto del campo sea telegénico. Algo que el Getafe, un adelantado de esta generación, no llegó a conseguir. Tebas piensa primar la ocupación del campo, el estado del césped y demás. LaLiga compite con la Premier, que ha conseguido un ‘look’ formidable, y en eso debemos estar todos.