Más líos: elecciones en baloncesto

En menos de dos meses (el 9 de julio) habrá nuevo presidente de la Federación Española de Baloncesto. La campaña va a ser de órdago. Por un lado, quienes propiciaron la caída de José Luis Sáez ya se mueven para ocupar su lugar; por otro, fuerzas de la ACB, próximas a la Euroliga, encuentran en estas elecciones una ocasión única para dirigir la Federación y ejercer así un control único sobre el baloncesto en España. Frente a todo esto, la línea continuista desde la propia Federación, encabezada por Jorge Garbajosa. Sus oponentes serán Arturo Aguado (Federación Vasca), Miguel Ángel Benavente (Tizona Burgos), Salvador Fábregat (Valenciana), Juan Carlos Hernández (Murciana) y Germán Monge (Vizcaína).

Aunque los seis candidatos responden a distintos intereses, se esperan alianzas una vez se conozca la composición de la Asamblea que elegirá al presidente. Los movimientos parecen dirigirse hacia un reparto de votos entre Garbajosa y Monge. El primero no tiene nada que esconder. Su perfil responde a la línea continuista de una Federación que en los últimos doce años llevó a las Selecciones masculina y femenina a ganar quince medallas, y a pasar de un presupuesto de cinco millones a veinte. Enfrente, Monge, una persona próxima a Querejeta, presidente del Baskonia, quien lleva años moviendo los hilos de los clubes desde la sombra. El baloncesto tendrá que decidir por qué tipo de gestión se pronuncia.