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10 PARTIDOS, 10 HISTORIAS

La profesionalidad de Alves y el inicio de Marcelo con Capello

Marcelo, Capello y un diagnóstico

Era noviembre de 2006. El Real Madrid anunció el fichaje de un jugador brasileño del Fluminense. Su nombre era Marcelo y tenía 18 años. “El futuro Roberto Carlos”, decían los periódicos. El conjunto blanco no pagó ni seis millones de euros por su fichaje (5,8 millones) en una operación encabezada por Mijatovic, Baldini y Bucero y aprobada por Ramón Calderón. En aquel mercado de invierno también llegaron dos jóvenes promesas de Argentina: Gago e Higuaín. Marcelo no tuvo un inicio sencillo como jugador madridista. Por aquel momento, no resistía la comparación con Roberto Carlos (“es mi ídolo”, dijo Marcelo en su presentación) y la entidad merengue valoró la opción de relegarle al Castilla, decisión que finalmente no se produjo. Aun así, la anarquía que desprendía el fútbol del lateral brasileño no terminó de encajar en los planes de Capello (jugó únicamente seis partidos aquella temporada). La inquietud creció en la planta noble del Bernabéu hasta el punto que Ramón Calderón preguntó al técnico italiano por la situación de Marcelo y por la de Gago e Higuaín, “Tranquilo, presi. Los tres futbolistas son futuro del Real Madrid y jugarán muchos partidos aquí”, respondió Capello. Sólo se equivocó en un caso…

La profesionalidad de Dani Alves

Todavía colea el polémico vídeo de Dani Alves tras la eliminación en la Champions. La idoneidad del montaje, obviamente, no parece la mejor, pero el juicio sumarísimo al que está siendo sometido (suplencia incluida contra el Valencia) parece demasiado severo. Hay quien pone en duda hasta su profesionalidad. Si preguntas en Sevilla, el veredicto es otro. Todo el mundo le pone por las nubes por su carácter competitivo y su grado de implicación. Monchi, voz más que autorizada, lo hizo público en Jot Down el pasado mes de septiembre: “A mí lo que siempre me ha llamado la atención de Daniel es su profesionalidad. No se perdía un entrenamiento. Hasta en los de recuperación él quería entrenar y había que decirle que no”.

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El gen rojiblanco de Correa

Su aparición siempre genera resultados. Ángel Correa demuestra su categoría cada vez que juega. Es el jugador con más goles (4) saliendo del banquillo en esta Liga. No se arruga por la suplencia. El argentino siente verdaderamente la camiseta del Atlético de Madrid. Desde 2006 sigue la andadura del club rojiblanco. El fichaje de Agüero, al que le equiparan con asiduidad, levantó su pasión por el equipo colchonero. “Veía por televisión cada partido que podía. Disfrutó como un niño con el título de la Europa League de 2010. ¡Se compró hasta tres camisetas del Atleti”, desvelan desde su círculo de confianza.

La intensidad de Fernando Navarro

El Sánchez Pizjuán recibió con honores a Fernando Navarro. El lateral dejó huella entre la afición del Sevilla. “No nací sevillista, pero puedo decir con orgullo que moriré sevillista”, señaló en su despedida. Nadie puede discutir su profesionalidad y su currículum. Fernando Navarro estuvo entre los 23 convocados por Luis Aragonés en la bendita Eurocopa de 2008. Después poco más se supo de él en la Selección. Corrió la leyenda de que algunos jugadores de La Roja se quejaron de la intensidad del lateral en los entrenamientos e indujeron a Del Bosque a no convocarle más. Rumorología que no desluce la hoja de servicios de Fernando Navarro en el Sevilla.

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Medjani, el central que no quiso Benítez

Medjani resucitó a un Levante en estado crítico. La llegada del central argelino en enero se ha revelado como un acierto del secretario técnico Manolo Salvador. El zaguero tiene pasado en el Liverpool. Gérard Houllier le incorporó en 2003 de las categorías inferiores del Saint-Étienne. Rápidamente destacó en el reserva ‘red’, en el que también figuraban otros futbolistas con proyección como Potter o Mellor. En Anfield vislumbraban en él a un central de futuro. La contratación de Rafa Benítez un año más tarde dinamitó sus aspiraciones. El técnico español quería apostar por defensas con cierta experiencia y nunca contó con Medjani. Fue cedido al Lorient, al Metz y en 2006 fue traspasado, finalmente, al Lorient.

Iturraspe, el fútbol y los amigos

Pasa con muchos niños. Cuando un Barcelona, Real Madrid o Atlético se interesa por un chaval emerge la disyuntiva de la elección. Seguir en el equipo de tu pueblo y con tus amigos o poner rumbo a un gran club con el riesgo latente de un posible revés. Un dilema de complicada resolución. Algo así le pasó a Ander Inturraspe. El mediocentro del Athletic estuvo en Lezama hasta que a los 14 años decidió regresar al Abadiño. En Bilbao no se lo creían. “Nos dijo que se aburría y que quería jugar con sus amigos”, recuerdan en el Athletic. El club bilbaíno intentó durante todo el año que recapacitara y logró, al menos, que un día a la semana fuera a entrenarse con ellos. Al final del curso se sucedió su vuelta definitiva. “Fue un error muy grande”, comenta siempre Iturraspe.

El vínculo de Zurutuza y el Lengokoak

Cuentan que quien pasa por el Lengokoak, uno de los clubes punteros de San Sebastián, queda marcado para siempre por un lazo irrompible. El equipo de los tres porteros de la Eurocopa 84 (Arconada, Artola y Urruti), del héroe del Puertollano Pela Arzak y del cántico de Anoeta de “Zuru, Zuru, Zuru, Zuru”. David Zurutuza perteneció al Lengo hasta edad infantil, aunque su nexo sigue vigente. El futbolista de la Real Sociedad participa en cada acto del club siempre que se requiera su presencia. No olvida sus raíces.

Tito, el hijo del Rayo

“Tito ha nacido para jugar en el Rayo Vallecano”. La frase es muy recurrente en Vallecas. El lateral cumplió ante el Villarreal 150 partidos en Primera con el conjunto franjirrojo. Una efeméride encumbrada con una asistencia decisiva a Miku en el gol del triunfo. Estamos ante el típico futbolista de perfil bajo. Siempre lejos de los flashes, humilde y hombre de vestuario. Un jugador que dignifica el fútbol, un jugador con el ‘sello Rayo’.

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La abuela de Pablo Hernández

Pablo Hernández rompió su gafe goleador en Balaídos y marcó su primer tanto con el Celta jugando como local. Seguro que se acordó de su abuela durante la celebración. En cada festejo lo hace, aunque sea un segundo. El ‘Tucu’ es argentino, pero juega con Chile. Su abuela, que era su mayor fan, era chilena y Pablo vivió con ella cuando tenía 11 años. “Serás profesional y jugarás con Chile”, le dijo un día. Toda la razón.

La reconversión de Isma López al lateral izquierdo

Nunca pudo triunfar en el Athletic, a pesar de ser uno de los niños bonitos de Lezama. Isma López se ha reencontrado ahora actuando como lateral izquierdo. Su historia avala la mano izquierda de Abelardo a la par que su crecimiento como futbolista. El técnico le expresó que debía buscar equipo hace dos pretemporadas. Isma no encontró ninguna salida a su gusto dictaminando no rendirse. Las bajas obligaron a Abelardo a situarle como lateral y el panorama dio un giro de 180ª grados. El de Pamplona fue decisivo en el ascenso; ahora se ha ganado la continuidad esta temporada. Tanto es así que en Bilbao ya se habla de la posibilidad de ‘repescarle’.