El lobo de ayer fue Draxler

Draxler representó ayer todas las pesadillas históricas del Madrid en Alemania. Se comió a Danilo en todo momento y por ahí empezó a resquebrajar a un equipo de Zidane que hizo uno de los peores partidos a este nivel que le recuerdo. Draxler ya había brillado ante el Gante y prometía mucho en esta eliminatoria, pero lo de anoche superó todas las expectativas. Salió por los dos perfiles, condujo el balón y participó en los dos goles que el Madrid tendrá que remontar. Se apagó algo en la segunda parte, pero en ningún momento desapareció del todo. Llegó Draxler como fichaje estrella y aunque en la Bundesliga no había sido capaz de explotar su talento en la Champions, tras lo de ayer, ya le ha salido rentable. Justificó su contratación.

Y cuando su entrenador le quitó en los últimos minutos Danilo por fin respiró. Draxler es el futbolista realmente distinto de un Wolfsburgo solidario en el que ayer trabajaron todos. Le dio el balón al Real Madrid, pero el trío Arnold, Guilavogui y Luiz Gustavo sirvió de balsa para un centro de la defensa lento con Dante y Naldo. Un equipo al que el Real Madrid nunca supo atacar por su escasa velocidad de balón.