Tres estrellas para tres puntos de oro

El Sporting-Espanyol sí fue un partido de palos, y no aquel derbi: tres para los locales (que merecieron algo más) y uno para los de Galca. Pero, sobre todo, supuso para los pericos no un paso adelante, sino tres. Por los tres puntos hacia la permanencia, por quebrar con una goleada la racha de nueve derrotas seguidas a domicilio y por los tres jugadores que se reivindicaron: Gerard Moreno, Burgui y Pau. Un doblete, un golazo (o “golasoooo”, como escribió Caicedo en Twitter) y varias manos salvadoras. Ellos tres dieron sendos pasos adelante justo el día en que más convenía que lo hicieran. El día en que se sumó una victoria que vale, si no media, sino una parte de la permanencia.

El gran tanto de Burgui, con el que se inició la remontada, es el primero que marca el extremo en Primera. Lo había logrado Asensio siete días atrás, ante el Deportivo, y solo quedaba él. Formidable manera de sumarse a la lista de realizadores. Estrenaba prácticamente Gerard su posición de ‘nueve’, relegado a la banda con Caicedo, y lo aprovechó con dos dianas; y cerca estuvo del ‘hat-trick’, de no ser por una falta que se inventó Velasco Carballo. Y Pau, siempre Pau, sacó varias manos, las justas para evitar la zozobra y enterrar cualquier debate ahora que Arlauskis vuelve. El que vuelve es el Espanyol.