Movistar no atacó a Froome

Después de siete días de Vuelta a España, ayer pudimos ver cómo las piernas pesaban en la subida a Capileira, el puerto más duro por el momento. La etapa no se movió mucho hasta el final, porque todos los favoritos se iban vigilando entre ellos en cabeza del pelotón conscientes de que quedaba la parte más dura de todo el recorrido, de la etapa y de la Vuelta.

Las piernas que más pesaron de todo el pelotón fueron las de Chris Froome. A falta de pocos kilómetros, el británico se quedó y sólo Fabio Aru se atrevió a atacar para intentar sacar ventaja. Movistar fue más conservador y no se lanzó, por lo que entiendo que lo hará hoy, aunque quizá no saque tanto como pudo lograr ayer. Con Froome nunca se sabe, siempre tiene margen de mejora, ya lo demostró el año pasado. Nairo necesita una buena ventaja antes de la crono y hay que sacarla etapa a etapa.

La otra cara de la moneda fue el líder, Esteban Chaves. El colombiano disfrutó de la etapa rodando tranquilo a rueda de sus rivales, que le llevaban cómodamente. El del Orica sigue demostrando que está en plena forma y que quiere el rojo en Madrid. Sus contrarios no tardarán en empezar a complicarle la vida.