Jackson nunca se rinde
Falcao es Falcao, Jackson es Jackson”. El delantero lo dejó claro al aterrizar en Madrid. Si ha superado a los mejores defensas del mundo también es capaz de desmarcarse del pasado goleador del Tigre en el Atlético. Comparar se hace irresistible. Comparten características, historia de gloria en Oporto y el duelo por la titular en la selección de Colombia en donde Jackson llega cada vez con más argumentos para ser el elegido por Pékerman. Es un 9 puro, potente, fuerte en el mano a mano y con gran remate de cabeza. Nunca se rinde. Lo demostró 10 años atrás cuando no se adaptaba en el Medellín. Más de una vez bajaron pitos de las tribunas inconformes con sus carencias técnicas. La estatura parecía jugarle en contra, lucía torpe. Pero Jackson no sólo aguantó, sino que le dio vuelta a la historia. Convirtió sus debilidades en fortalezas. Cinco años más tarde se fue siendo ídolo tras consagrarse como goleador del torneo en el que el DIM fue campeón.
De Colombia voló a Oporto con una escala en México. Disputó tres Champions y una Europa League, marcó 91 goles. Se cansó de batir récords y le dijo sí al Atlético. Jackson es el centrodelantero que puede hacer rendir en goles el talento de Griezmann. Además es un gran pívot. Baja, pasa, recibe y define. La puntería se hace más fina cuando hay trabajo y experiencia. En tiempos en los que los fichajes de niños futbolistas son tendencia, Jackson reivindica al jugador que ha hecho carrera. Sin duda será pieza fundamental en un Atlético al que cada vez se le exige menos lucha y más fútbol. Simeone puede estar tranquilo porque el colombiano es sinónimo de determinación en el área. Jackson nunca se rinde.