El sorprendente rendimiento de Suzuki en MotoGP
Suzuki es uno de los nombres importantes del Campeonato del Mundo de motociclismo, tanto como de esta industria, y su decisión de regresar a los grandes premios en 2015 fue una buena noticia. Volvían a MotoGP después de una etapa previa con más sombras que luces, muy lejos del rendimiento en la época gloriosa de la marca de Hamamatsu. El desafío no era fácil en una categoría cada día más complicada técnicamente, pese a que habían trabajado en el proyecto durante el año anterior con intensidad. Sin embargo, en sólo siete carreras han demostrado que van muy en serio en este retorno y han sorprendido al colocar a sus dos pilotos, Aleix Espargaró y Maverick Viñales, en las dos primeras posiciones de la parrilla de salida del GP de Cataluña.
Cierto es que Suzuki se beneficia de las ventajas que el reglamento concede a los nuevos fabricantes, como la disponibilidad de un neumático más blando que el de sus competidores que resulta determinante a una vuelta, valioso por tanto en calificación. Pero ahí está Aprilia en las mismas condiciones y en su caso en la cola del pelotón, así que obviamente los japoneses están haciendo muy bien. Lo más positivo para sus intereses, que son también los de sus pilotos españoles, es que su evolución parece muy sólida y constante. Se encuentran aún a cierta distancia de las otras marcas de referencia (Yamaha, Honda y Ducati) pero si son capaces de mantener esa velocidad de crucero en sus mejoras la brecha debería reducirse aún más y sería interesante para el Mundial.