Ancelotti debe seguir sí o también

En tiempos de zozobra, conviene poner en perspectiva la historia reciente del Real Madrid desde que Florentino Pérez es presidente de la entidad, con su espantada entre medias incluida. Excepción hecha de Mourinho, el Madrid ha sido una trituradora de entrenadores. Todo empezó con Del Bosque, cuyo ratio temporadas-títulos fue sencillamente formidable, con dos Ligas y una Champions League en esa etapa. Al hoy seleccionador español, hombre de la casa, no se le renovó y, más allá de eso, se le vilipendió, intentando desprestigiarle, como si los títulos no fuesen con él.

El iluso presidente pensó que los títulos los ganaba él o el modelo galáctico que impuso. El problema es que el modelo es económico y no deportivo. Es tal el desfase que el club más rico del mundo cree que no le hace falta tener ni un director deportivo porque a una plantilla así la entrena cualquiera. Craso error. La realidad es que el Madrid de Florentino ha celebrado más fichajes que títulos. Desde entonces, han pasado técnicos de todo tipo de pelaje y Mourinho fue el único que tuvo nombre de proyecto. Si alguien se ha ganado seguir hasta el final de su contrato es Carlo Ancelotti, que ganó la Décima y eso tiene un mérito extraordinario. Siendo el Barcelona de Messi un equipazo impresionante, el gran rival del entrenador del Real Madrid es el propio modelo de club, que es desequilibrado hasta en su concepto. Echarle ahora sería una irresponsabilidad más…