Arriba. El Atlético sigue tercero en la tabla y esperará mañana a ver el resultado del Valencia, su inmediato perseguidor. El conjunto rojiblanco no hizo un gran partido, tampoco lo necesitó, y se deshizo de la Real Sociedad siendo práctico y haciendo las cosas sencillas. Sin Juanfran, Godín ni Mandzukic, el conjunto de Simeone tiró de oficio y de acierto ante el gol para llevarse los tres puntos. El Atlético ha vuelto a esa etapa en la que gana los partidos casi por inercia. Lo hizo ante Getafe y Córdoba y volvió a hacerlo ayer. La gente volvió a disfrutar y coreó el nombre de todos sus futbolistas, de Fernando Torres, de Saúl, de Oblak, de Griezmann... incluso la afición también se acordó del Mono Burgos y del Profe Ortega. La gente acude feliz al Calderón y eso se nota en el ambiente y en las ganas que tienen los seguidores de animar.
La racha El Atleti ha dejado atrás ya su pequeño bache, ese en el que no perdía partidos, pero tampoco los ganaba. El conjunto del Manzanares lleva siete partidos sin perder (cuatro victorias y tres empates) y va sacando adelante sus compromisos. En los últimos cuatro encuentros no ha encajado un tanto y ese hecho hace que el equipo haya recuperado la confianza. Y al ponerse tan pronto con el 2-0, los del Cholo no tuvieron que hacer un gran desgaste, lo que le vendrá bien de cara a futuros partidos. El próximo partido en el Calderón será el próximo martes, en Champions, ante el Real Madrid. Cita mayor.
Griezmann. El francés es uno de los jugadores más en forma del Atlético y ante la Real volvió a marcar. Lleva 16 goles en Liga e iguala la cifra que ya consiguió en el conjunto realista. En el total de la campaña ha anotado 19 tantos (los 16 ligueros, más uno de Copa y dos de Champions). Su fichaje fue una de las adquisiciones del verano y Griezmann ha demostrado el motivo por el que el Atlético ha pagado 30 millones por él. Ahora que llega la parte más importante del ejercicio, parece que está preparado para dar lo mejor de sí.
Oblak. No encajó gol y el portero esloveno no ha recibido ningún tanto desde que jugara en Champions ante el Leverkusen. La grada le coreó lo de “Obi Oblak cada día te quiero más..” y el cancerbero ha empezado a mostrar su valía. Para el Atlético es primordial que vaya adquiriendo confianza y se sienta importante en el Atlético.
Granero. La grada también se acordó de Granero, para quien el salto de Griezmann al Atlético no era dar un paso adelante en su carrera deportiva. Bravuconadas y comentarios para la galería aparte, el medio tuvo un paso fugaz por el Calderón y fue más noticia por el hecho de que la afición rojiblanca se metiera con él que por lo que aportó. Jugó sólo diez minutos y Oblak le margó la noche tras sacarle una falta que iba dentro. El equipo vuelve a ser ambicioso. Este Atlético quiere más y más. El equipo vuelve a ser ambicioso. Y un Atleti con ambición y con ganas de ganar es mucho Atleti.