El Cholo rebosa fútbol

El Cholo rebosa fútbol. Lo hacía como jugador, lo hace como técnico y lo transmite. Esa es la primera sensación que me dio al verle rodeado de los suyos. De sus tres hijos, de su amigo Gustavo López. Transmite tanto que a mí también me hizo sentir uno más de los suyos, en una charla franca, con tiempo para bromas, recuerdos, reflexiones... En Canal+ tratamos de sentar a nuestros abonados a aquella mesa en plena Navidad en Buenos Aires. Aun así, difícil plasmar en toda su intensidad las miradas de sus hijos cuando hablaba, mezcla de admiración, cariño y respeto, coloquen el orden que quieran. Mezcla explosiva. También difícil transmitir las del Cholo a su hijo Giovanni, el primero que trata de seguir sus pasos y que justo esta noche arranca en la delantera argentina el Sudamericano Sub-20. Vi un Cholo tranquilo, relajado, directo y, sobre todo, honesto.

Honesto para reconocer que su equipo es peor que Madrid y Barça, y que ser conscientes de eso es lo que les llevó al éxito. Saber exprimir tus virtudes para ocultar tus carencias, mandamiento principal. Lo expresó tal cual. Honesto para alabar el papel de los jugadores por encima de los entrenadores, para alabar al Mono Burgos. Relajado para recordar anécdotas con Gustavo de aquellos partidos con Argentina, o para analizar errores tácticos cometidos como en la final de los juegos de Atlanta 96. Reflexivo en muchos momentos, me quedo con la sensación de que el Cholo es capaz de convencer a cualquiera de sus posibilidades. Y esa es la clave del éxito de este Atlético. Brindis por el Cholo, por sus hijos y por Gustavo. Y por Osvaldo, padre de Gustavo y cocinero de un asado inolvidable. Un asado al que pudimos invitar a todos los abonados de Canal+.