El Madrid coge aire en Belgrado
Victoria, por fin, del Madrid de baloncesto. La necesitaba como el comer. Pierde ayer en Belgrado, y el futuro del equipo en la Euroliga hubiera quedado seriamente comprometido. Esta fase de la competición resulta más seria que la primera, donde se puede pasar con más derrotas que victorias. No es que resulte una proeza conseguir la clasificación en esta segunda, pues pasan la mitad de los equipos —los cuatro primeros de cada grupo—, pero tal y como está el Madrid, se le ve inferior al Barcelona y al Maccabi, y tendrá que luchar por conseguir alguno de los otros dos puestos con el Panathinaikos y el Galatasaray. Llega a perder ayer y ya tendría que empezar a luchar también con los otros tres rivales, entre ellos el propio Estrella Roja.
El Estrella Roja es un equipo que impresiona por el ambiente de su cancha, pero con una plantilla muy limitada, cuyos porcentajes de acierto son realmente bajos. Ayer mismo, un 35% en tiros de tres, un 42% en tiros de dos y un 65% en tiros de uno. Llega a meter los ocho tiros libres que falló, y ahora estaríamos hablando de otra cosa. La diferencia de calidad entre sus jugadores y los madridistas es notable. Por eso ganó el Madrid, con un segundo tiempo más desahogado de lo que al final reflejó el marcador. Un respiro para Laso y para la propia plantilla, que han convertido cada partido en una final, porque comienzan a jugar sin red. Sólo la pueden recuperar ganando partidos. El domingo espera el Andorra y el jueves el Galatasaray.