Un desafío mayúsculo para Alonso y Vettel
Era sólo un trámite pero obligado y necesario. Alonso deja de ser piloto de Ferrari y le cede su asiento a Vettel. Un desafío mayúsculo al que se enfrentarán a partir de ahora, con diferentes connotaciones pero en ambos casos cargado de responsabilidad y también presión. El asturiano llega al que debería ser el último equipo de su trayectoria en la Fórmula 1, un nuevo proyecto de McLaren con motores Honda que presenta incertidumbres lógicas y con el paso del tiempo apremiándole. Se marcha de Maranello porque necesita ganar, sueña con ese tercer título que le coloque en el mismo peldaño de la gloria que su ídolo Senna y es consciente de que posiblemente sea ahora o nunca. Tiene ilusión por conseguirlo pero tampoco será una tarea sencilla...
No más cómoda es la posición del alemán. La Scuderia es un barco a la deriva y nadie tiene muy claro si allí hay alguien con la habilidad necesaria para coger el timón y recuperar el rumbo. Así que Vettel está obligado a demostrar lo que es capaz de hacer con un monoplaza que dista mucho de ser el mejor, se acabaron los tiempos felices de un Red Bull invencible. Tiene la tarea de aportar el valor añadido que representaba Alonso, superar como él a su compañero Raikkonen y sumar su experiencia, que ya es mucha, para que Ferrari vuelva a ser la leyenda que el español no ha encontrado ni por asomo. Ambos necesitaban aire fresco y eso seguro que lo van a encontrar, sólo queda saber si con los resultados apetecidos. Será muy interesante descubrirlo.