Casillas, Alcácer, la Vuelta y los Gasol

Purito, Contador y Valverde se enzarzan en cada cuesta de final de etapa, mientras el impasible Froome mira con arrobo su potenciómetro. Los Gasol y compañia llevan un galope victorioso con la mirada fija en el domingo y en la selección USA. Vuelta a España y Mundial de Baloncesto divierten estos días a la afición deportiva del país, mientras, los tiempos cambian, empezamos a mirar a La Roja con escepticismo. La caída en Brasil aún pesa en las espaldas de todos y la impresión de que el equipo no es el mismo, ni en sus actores principales ni en su juego, es hoy por hoy imposible de alejar.

Esta noche pondremos todos la tele. Vuelve Casillas, confirmó ayer Del Bosque, y la verdad es que se entiende mal el secreto, que en este caso equívoco crea malestares. ¿Era tan difícil decir que el primero lo iba a jugar De Gea y el segundo Casillas? Al fin y al cabo, Del Bosque ha dado con frecuencia los amistosos a Víctor Valdés y a Reina. No se salía de la norma. Al alinear a De Gea en París sin anunciarlo provocó un impacto por la situación que pasa Casillas. Al recuperar hoy a éste, provoca otro impacto. Sin quererlo, envuelve la Selección en una humareda de polémica y confusión.

En fin: el equipo empezará en Casillas, con sus 156 partidos, y terminará en Alcácer, que lleva uno. Ahí, en ese amplio arco, cabe todo el territorio de reconstrucción de un equipo que fue y ya no es, y que ahora afronta una prueba menor y otra mayor. La menor es el partido ante Macedonia, país que merece todo el respeto de la Historia (de ahí salió Alejandro Magno, nada menos), pero que en fútbol no es una potencia. La prueba mayor es cautivar otra vez a una afición enfriada, que se exalta con Purito, Contador, Valverde, los Gasol y compañía, pero que ya mira a La Roja con aprensión.