El Tour de las oportunidades para los segundos espadas
Algunos equipos vienen al Tour de Francia con el objetivo de conseguir un triunfo en una etapa, pero más del 40 por ciento de ellos se van a su casa sin llevar nada en la mochila, por eso hay tanta lucha por conseguir una victoria. Llevamos varios días viendo a la escuadra de Sagan luchar como titanes para llevar a su jefe de filas colocado a los últimos metros, pero es tanto el empeño que pone que al final funde a su equipo y se queda solo. Para controlar una etapa con un terreno muy exigente, sin prácticamente nada llano, tienes que tener un equipazo y Sagan no cuenta con él. Cualquier aficionado hubiese apostado que el eslovaco ganaba como mínimo dos etapas y va a tener difícil conseguirlo.
Valverde está obsesionado con la rueda de Nibali y tiene que estar más atento a Porte, segundo en la general, porque si quiere subir un escalón más es al que tiene que marcar. El español tiene calidad de sobra para vigilar a un ciclista a falta de 15 km, y más en ese terreno. Roche, muy valiente, ha intentado por todos los medios conseguir un triunfo de etapa, aunque sin suerte, para recordar a su jefe de filas, Contador, que ellos siguen peleando. Rogers también lo ha intentado. En definitiva, este Tour es la oportunidad de los segundos espadas como Porte (Sky), que con la ausencia de su jefe puede brillar. El australiano siempre sufre un día malo en la alta montaña y esperemos que lo tenga para los intereses de Valverde.