Este Mundial recupera índice goleador

Siempre he visto estas fases finales de campeonato con la estructura del teatro clásico, que se dividía en tres actos, lo que veníamos a conocer como presentación, nudo y desenlace. Ha terminado el primero: la presentación. Ya sabemos quiénes son los personajes, cuáles sus caracteres, cuál la trama. Ahora empieza el ‘nudo’, empieza hoy mismo, con el Brasil-Chile y el Colombia- Uruguay. Y ahí llega la primera reflexión: cuatro americanos. América presentaba diez equipos, entre Norte, Centro y Sur. Siguen ocho de ellos. Sólo dos han caído eliminados, Ecuador y Honduras.

¿Sólo casualidad o signo de los tiempos? Yo creo que más lo segundo. Este Mundial está aportando un juego más técnico y elaborado del que solíamos ver, algo que nos puede servir de consuelo a los españoles, porque mucho ha influido La Roja en ello. No sólo lo ha dicho Tostao, lo han dicho muchas otras voces. Se juega mejor, se arma más desde atrás, se cuida mejor la pelota. Y, llevando el fútbol a ese territorio, los americanos tienen una ventaja natural, al menos de México para abajo. EE UU es América, sí, pero me cuesta emparentar su fútbol con el que se juega a partir de su conflictiva frontera Sur.

Un Mundial con goles, además. Nos aproximamos a los registros de México 70, después de un continuo descenso. Un salto feliz. No era España ejemplo de meter goles, por escasez de especialistas, pero su herencia ha servido para eso. Por lo demás, se renueva la perogrullada de que el fútbol es de los futbolistas, y ahí tenemos a Neymar y Messi sacando adelante a sus selecciones a golpe de aciertos personales. Europa, más pizarrista, ha sufrido bocados enormes en su escuadra. Respecto a África, la seguimos esperando. El nudo nos dirá más cosas, pero hasta ahora esto es lo que hay. Y no es poco.