El récord que Odriozola no quiso

La Federación Internacional de Atletismo ha creado el Mundial de relevos, una competición que se disputará este fin de semana en las Bahamas, y que incluye distancias no habituales, tales como 4x200, 4x800 y 4x1.500, pruebas en las que presentamos equipo. Este Mundial nos llega tarde. Nosotros, que hemos sido una potencia mundial en 1.500 metros, ahora mismo somos poca cosa. Nos pilla hace unos años y arrasamos. Tuvimos la ocasión, pero no la quisimos. Recuerdo que en los años 90 le comenté a Odriozola la posibilidad de organizar con la cobertura de Canal + unos relevos 4x1.500 con el fin de superar el récord mundial, que por entonces lo tenía la extinta Alemania Federal en 14:38 minutos.

Odriozola no quiso saber nada. Pertenecía a un mundo federativo radical, y cuanto fuera ajeno a éste sonaba a patochada. El 4x1.500 estaba reconocido, pero como no se disputaba en competiciones oficiales, era como si no existiera. Se esfumó así la oportunidad de establecer un récord que aún hoy podría estar vigente. Teníamos a Fermín Cacho y a Reyes Estévez en plenitud, con marcas que rozaban los 3:30 minutos; tras ellos, una legión de escuderos con marcas por debajo de 3:35. Poniendo cinco segundos más a cada uno, margen más que considerable, la marca que salía era inferior al récord: 14:30. Años más tarde el club Larios hizo el intento con sus atletas: 14:46 ¡y sin Cacho ni Estévez! Veremos cuál es nuestro valor ahora.