Argentina estuvo muy pendiente
Fue un pedido. Casi un ruego. Una declaración de principios a su esposa. “Sé que ahora vienen los niños, pero durante los 90 minutos del partido, yo no existo”. La frase del prestigioso periodista y escritor Ariel Scher resume a la perfección lo que sucedió en cada casa argentina durante el partido que ayer decidía la Liga en España. Así transcurría el infartante Barcelona-Atleti en Argentina. En las redacciones, en los bares, en los clubes barriales... Todo el país estuvo pendiente del duelo que consagró al Cholo como el quinto entrenador argentino campeón del campeonato de España.
Patricia, la mujer de Scher, cocinó para toda la familia. Hasta los niños vieron el partido del Camp Nou en el extenso sillón del escritor. Los periódicos nacionales siguieron con mucha atención el partido. El encuentro fue televisado en directo para todo el país y nadie quería perdérselo. Así, los aficionados se tuvieron que dividir entre el cariño hacia Messi, la admiración hacia Mascherano, el reconocimiento hacia el Tata y los elogios hacia el milagroso Simeone. Pero al final todos aplaudieron al campeón. Y el fútbol argentino acabó agradecido. La pelota, como dijo Diego, no se manchó.