Cristiano prepara el incendio de Múnich
El Bernabéu disfrutó de lo lindo, incluso hizo la ola. La espera del partido de Múnich se hace así más grata. Lo mejor, que Cristiano está plenamente recuperado. Marcó dos golazos, tiros cruzados desde fuera del área, en su zona preferida, ambos a la escuadra contraria. Pero diferentes. El primero fue una bomba inteligente, un golpe limpísimo que le dio al balón una trayectoria curva en plano inclinado, sobrepasando a Andrés con un vuelo de bomba inteligente. El otro fue un cañonazo sin piedad ni matices. Dos goles que le colocan ya en 30 en esta Liga, en 47 en el total de la temporada.
Pero no sólo él, todo el Madrid está bien. Son baja Arbeloa y Khedira, que tienen vitola de titulares, y el prometedor Jesé, pero la plantilla ha mostrado tener buenos repuestos para todo. Descansaron varios de los del miércoles pero el equipo fue firme, enérgico, saludable, jugón. Un partido abierto, al ataque, pero llegando con velocidad, sin parsimonia, muy del viejo gusto del Bernabéu. Dos defensas, Sergio Ramos (el único titularísimo que jugó los noventa minutos) y Carvajal completaron la goleada. El madridismo mira a Múnich y más allá. Ahora mismo, todo es posible.
Mientras llega Múnich, el Madrid entretendrá la espera mirando a Valencia. Al Atlético le quedan cuatro partidos y puede pinchar en uno de ellos, pero sólo en uno, si pensamos, que es lo razonable, que el Madrid lo va a ganar todo. Así que esta tarde hay mucha Liga en Mestalla. El Barça, que vive su duelo por Tito (recordado en todos los campos) jugará sus bazas, pero está detrás de los dos madrileños. Sus posibilidades son menos. Por lo demás, este sábado nos dejó la despedida del Betis, un club que es Bien de Estado. Viva el Betis manque pierda. Es su undécimo descenso a segunda. Siempre vuelve.