El reto de un técnico ambicioso

El Rayo tiene conseguida virtual, pero no matemáticamente, la permanencia una temporada más en Primera. La salvación podría certificarla esta tarde en el partido frente al Granada en el estadio de Los Cármenes. Lo consiga o no, Paco no se conforma sólo con eso. El técnico del equipo vallecano aseguró ayer que lleva varias semanas pensando en que es posible alcanzar un nueva meta por la que pelear. “Es una obligación intentar ser décimos. Es un objetivo real y nos lo tenemos que plantear como reto bonito”, afirmó.

Ese nuevo envite que ha asumido el conjunto franjirrojo confirma la ambición que tiene un técnico que a veces ha sido tildado de suicida por la valentía en sus planteamientos, pero que finalmente ha demostrado que asumir esos riesgos han llevado al Rayo a continuar al menos una campaña más en la élite del fútbol español. Paco comentó a principio de temporada que no quería que este año se hiciesen comparaciones con lo que hizo su equipo en el anterior. Sin embargo, hay que reconocerle que, una vez ajustados algunos detalles, el resultado ha sido similar y la posición final del cuadro vallecano puede ser parecida.