Djokovic vuelve a meter miedo

Djokovic tendrá menos títulos que Nadal (43-62), tampoco le ganará en el cara a cara (18-22), pero no hay duda de que es su bestia negra. Hubo un año, el 2011, que resultó terrible. Le ganó todos los partidos. Ahora vuelve ese mismo temor. Se miran los tres últimos enfrentamientos, y Djokovic ha arrasado: 6-3 y 6-3 en 87 minutos el pasado mes de octubre en Pekín, 6-3 y 6-4 en 96 minutos en el Masters al mes siguiente en Londres, y 6-3 y 6-3 en 84 minutos ayer en Miami. Nada que objetar ante tal contundencia. Ni siquiera que todos estos enfrentamientos fueran en superficie dura, porque sin ser la especialidad de Nadal, tampoco es precisamente manco sobre ella. Simplemente, hay que reconocer la superioridad de Djokovic.

Tal es así que se está mostrando como un rival mucho más duro que Federer. Nadal le sucedió como número uno, y ahora le está costando sangre mantenerlo ante Djokovic. Son tres jugadores enormes que han coincidido en el tiempo. Federer va cediendo ante los dos, aunque a Djokovic aún le gana 17-16 en sus enfrentamientos. Pero el presente ya no es suyo. Por detrás nadie aprieta, por lo que a la rivalidad Nadal-Djokovic le queda mucho recorrido. Eso es lo que da miedo. Al serbio no se le aprecian síntomas de debilidad. Es más, parece disfrutar en los partidos ante Nadal, lo cual le hace más fuerte aún, y su entereza tiene que causar mella en nuestro campeón. En dos semanas llega la tierra, y veremos. Es la esperanza que nos queda.