Un ejemplo para los canteranos
Muchas veces se llena la boca poniendo como ejemplo de implicación a los canteranos de Lezama y más concretamente a los vizcaínos. Se habla y no para de que el único futuro es apoyarse en ellos, y que traer a futbolistas de las otras provincias pone en riesgo el sentimiento Athletic. Partiendo de la base de que el río del que se surte el club tiene el caudal que tiene, lo que resulta verdaderamente clave es acertar no sólo en las virtudes futbolísticas, sino en las personas.
De Marcos es del Athletic hasta las cachas. Ya traía el sentimiento de Laguardia, pero ha sido pisar Bilbao y crecerle la pasión rojiblanca. De ahí que su mensaje siempre sea colectivo, a pesar de que haya perdido mucho protagonismo con el cambio de entrenador. Habla de que en esta plantilla los que no juegan no restan. Quizás el año pasado no sucedía así (con algunos de casa) y por ello iban peor las cosas. Ver a Ekiza o Etxeita no bajando los brazos pese a saber que Valverde no les tiene en mente es digno de reseñar. Urrutia (que habla hoy) tiene que buscar referencias que suplan a los Iraola, Gurpegui y Aduriz en un medio plazo. De Marcos, Iturraspe y Susaeta son, claramente, tres de ellas. Ahora falta que los que más foco tienen se suban al carro que debe tirar muchos años del gran club.