Italia, una cenicienta
Ahora todos habrán entendido por qué Prandelli no quería jugar el amistoso de anoche. Pero nadie, tampoco el seleccionador italiano, podía imaginar que el equipo pudiese fracasar a nivel de juego, de espíritu y de velocidad frente a l equipazo campeón del mundo. Italia parecía una cenicienta invitada a un baile de alto nivel en el cual sólo podía mirar desde abajo a los rivales. El debut del defensor Paletta es una de las pocas notas positivas pero no puede ser un consuelo porque la verdad es que el marcador es mentiroso y advierte que Italia está muy lejos de España.
Prandelli no ha aprovechado la oportunidad para experimentar con jóvenes como Verratti y tampoco para probar al mejor equipo. Eligió una vía mediana que no ha servido para nada. Ojalá pueda servir para bajar el entusiasmo y dejar entender que Italia no puede ir al Mundial como una de las favoritas. Pero a veces las cenicientas se transforman.